Ejercicios para locutores

Para realizar una buena locución es necesario tener nuestra voz en óptimas condiciones, no importa si se trata de una grabación larga o corta, debes tener siempre en cuenta que la voz es un músculo que hay que ejercitar y calentar para no lastimarte en una grabación.
No basta con abrir la boca para producir sonido, existe una serie de órganos, músculos y diversas partes de nuestro cuerpo que están involucradas en la emisión de la voz, mientras más relajado te encuentres para grabar, te aseguro que los resultados serán mucho mejores. Pon atención a estos once rápidos y sencillos ejercicios de calentamiento para eliminar la tensión física y vocal.
1. Masajea la base de la lengua, en la zona esponjosa justo detrás del hueso de la barbilla. Para empezar, apoya los dedos índices en la parte superior de la barbilla. Deja caer la mandíbula, lo que provocará dejar tu boca abierta. Mientras descansas los dedos índices en la barbilla utiliza tus pulgares para dar masajes profundamente en la base de la lengua. Evita llegar demasiado lejos o puedes vomitar.
2. Suelta la tensión de las articulaciones temporomandibulares. Para encontrar dichas articulaciones, coloca tu mano delante de las orejas a ambos lados de la cara y abre la boca. El espacio que se abre a medida que se mueve el hueso maxilar es la articulación temporomandibular. Masajea estas articulaciones con los dedos o las palmas de las manos. Suelta la mandíbula un poco más y masajea profundo con cada exhalación.
3. Estira la lengua fuera de la boca lo más que puedas en todas direcciones.
4. Haz todas las caras graciosas que puedas para ejercitar todos los músculos faciales y estirar las mejillas.
5. Masajea el cuello y los hombros. También es una buena idea girar cuello y hombros para aflojarlos.
6. Haz ruidos con tu boca y lengua, como trompetillas, o “rrrrrrrrr” con la lengua bajando y subiendo la intensidad, mientras sacudes todo tu cuerpo o saltas de manera que saques la tensión que pudiera haber aún en tu cuerpo.
7. Bosteza un par de veces para abrir la parte posterior de tu garganta.
8. Haz algún zumbido manteniéndolo por 20 segundos o más hasta que sientas un ligero cosquilleo en tus labios y nariz, repítelo 3 o 4 veces.
9. Haz con tus labios el sonido “Brrrrrrrrr”, empieza en el tono que quieras y posteriormente sube y baja el rango de voz.
10. Vocaliza ahora con la letra “Aaaaaaa”, de igual forma empieza en el tono que desees y después sube y baja el rango. Es importante que lo hagas con la boca bien abierta y que sea un sonido firme.
11. Por último canta o tararea cualquier canción por un rato, lo importante es que sea una canción que te anime o te inspire.
Si llegas a tener alguna molestia o dolor durante la relajación, probablemente sea debido a que tienes mucha tensión atrapada en tu cuerpo. Es muy importante que mantengas una profunda respiración constante durante todos los ejercicios, así la tensión se irá liberando; procura al exhalar hacer ruidos como “Maaaa” o “Ahhhh” y masajear y estirar la zona afectada. Muchas personas experimentan tensión en la lengua, mandíbula, cara, cuello u hombros, pero no están consientes de ello ni de cómo les afecta el estrés en su comunicación verbal y no verbal.
Ahora sí, después de estos sencillos ejercicios de relajación, estás listo para sacarle más jugo a tu voz. Realízalos frecuentemente y tendrás mejores resultados. Una vez que termines de grabar, evita tomar bebidas muy frías o muy calientes. Mucha suerte.